Proceso de depuración

Actualmente Aigua de Rigat está en proceso de poner en marcha la nueva planta depuradora de agua residual en l'Espelt, está previsto que esté a pleno rendimiento durante el primer trimestre de 2019. Depurará las aguas residuales del núcleo de l'Espelt (Òdena).

Cuando esté operativa, las aguas residuales se someterán a un proceso de depuración para reducir la carga contaminante. Este es el paso previo para poder retornarla al medio natural con los mínimos riesgos ambientales.

Esta estación de depuración es de las más modernas que existen y se basan en la tecnología de biodiscos. Estos discos se sitúan sobre un eje y están parcialmente sumergidos en agua residual y giran lentamente. La rotación hace que la biomasa se mantenga con condiciones aeróbicas (presencia de oxígeno) y separa los sólidos del agua por sedimentación posterior en un decantador.

Es una técnica que tiene un gran rendimiento respeto a las plantas depuradoras convencionales, no generan olores, tienen un impacto visual y acústico mínimo y un coste energético reducido, asociado a un mínimo mantenimiento.

Está diseñada para tratar los volúmenes actuales de las aguas residuales en este núcleo y para los volúmenes futuros derivados del crecimiento urbanístico de la zona.